Perderse parecía lo peor,
perderse y no encontrar el rumbo.
Llevar un mapamundi
e ir a la deriva,
ignorar el geoide.
Perderse parecía lo peor.
Y el chico corre por la nieve,
escapa de la lluvia,
brinca todos los vientos.
Continuar una travesía
desde la voluntad de perderse.
Nada le retiene,
ni llevar un sensor injertado,
nada desdibuja
el estuario de su manglar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario